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COLOSENSES
Autor: Pablo
Tema: la supremacía de Cristo
Fecha: 62 d.C.
Propósito
Pablo escribió Colosenses para:
[1] combatir la peligrosa falsa enseñanza que estaba
suplantando la posición central y la supremacía de Cristo en la creación, la revelación,
la redención y la iglesia; y
[2] subrayar la verdadera naturaleza de la nueva vida en Cristo y sus exigencias al creyente;
Trasfondo
La
ciudad de Colosas estaba situada cerca de la Laodicea (Colosenses, 4:16), en el
suroeste de Asia Menor, cerca de 160 kilómetros al este de Éfeso. Al parecer,
la iglesia de Colosas se fundó como resultado del ministerio excepcional de
Pablo durante tres años en Éfeso (Hechos, 20:31), cuyos efectos fueron tan
poderosos y de tan largo alcance que “todos los que habitaban en Asia, judíos y
griegos, oyeron la palabra del Señor” (Hechos, 19:10). Aunque Pablo pudiera no
haber visitado Colosas (Colosenses, 2:1), mantenía comunicación con la iglesia
por medio de Epafras, uno de sus conversos y asociados de Colosas (Colosenses,
1:7, 4:12).
El
motivo de esta epístola fue la aparición de una falsa enseñanza que amenazaba
el futuro espiritual de la iglesia de Colosas (Colosenses, 2:8). La naturaleza
exacta de la herejía de Colosas no se describe en la epístola, pues los
lectores originales la conocían bien. Por las declaraciones de Pablo contra las
falsas enseñanzas, se deduce que la herejía que socavaba y reemplazaba la
posición central de Jesucristo era una extraña mezcla de doctrinas cristianas,
ciertas tradiciones judías no bíblicas y filosofías paganas (semejante a la
mezcla de las sectas de hoy día).
Autoría
Cuando Epafras, dirigente de la iglesia de Colosas y, tal vez, su fundador, viajo a visitar a Pablo y a informarle acerca de la situación en Colosas (Colosenses, 1:8, 4:12), Pablo escribió esta epístola.
Estaba
preso en ese tiempo (Colosenses, 4:3, 10, 18) probablemente en Roma (Hechos,
28:16-31) aguardando su apelación ante Cesar (Hechos, 25:11-12). El colaborador
de Pablo, Tíquico, entregó la epístola en Colosas a nombre de Pablo
(Colosenses, 4:7).
Estructura
Después de saludar a la iglesia y expresar gratitud por la fe, el amor y la esperanza de ellos y su progreso continuo como creyentes, Pablo se enfoca en dos asuntos clave:
[1] la doctrina correcta (Colosenses, 1:13 – 2:23); y
[2] las exhortaciones practicas (Colosenses, 3:1 – 4:6);
En el aspecto teológico, Pablo recalca el verdadero carácter y la gloria del Señor Jesucristo. Él es la imagen del Dios invisible (Colosenses, 1:15), la plenitud de la deidad en forma corporal (Colosenses, 2:9), el Creador de todas las cosas (Colosenses, 1:16-17), la cabeza de la iglesia (Colosenses, 1:18) y la fuente de la salvación, la cual es suficiente para todo (Colosenses, 1:14, 20-22).
Mientras que Cristo es del todo suficiente, la herejía de Colosas es totalmente insuficiente: hueca, engañosa, humanista (Colosenses, 1:18), de espiritualidad superficial y arrogante (Colosenses, 2:18) y carente de poder contra los deseos pecaminosos del cuerpo (Colosenses, 2:23).
En
sus exhortaciones prácticas, Pablo aboga por una vida fundada en la completa
suficiencia de Cristo como el único camino de progreso en la vida cristiana. La
realidad de la morada interior de Cristo (Colosenses, 1:27), debe ser evidente
en la conducta (Colosenses, 3:1-17), las relaciones sociales (Colosenses, 3:18
– 4:1) y la disciplina espiritual (Colosenses, 4:2-6).
Características especiales
Tres
son las características principales de esta epístola:
[1] más que cualquier otro libro
del NT, Colosenses enfoca la verdad de la preeminencia de Cristo y la
integridad del creyente en El;
[2] afirma con fuerza la plena
deidad (divinidad) de Cristo (Colosenses, 2:9) y contiene uno de los más
exaltados pasajes del NT acerca de su gloria (Colosenses, 1:15-23); y
[3] muchos la consideran como la
“epístola gemela” de Efesios, porque ambas tienen ciertas semejanzas de
contenido y fueron escritas casi al mismo tiempo;
Cristo en Colosenses
Cristo es “aquel en quien habita toda la plenitud de la divinidad”.
Colosenses, 2:9 Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad,
Estudios relacionados
Observaciones adicionales
Aunque toda la epístola es importante, no debiéramos dejar de leer y profundizar los siguientes pasajes:
[+] la divinidad de Cristo (Colosenses, 1:15, 19, 2:9);
[+] todas las cosas – materiales y espirituales –
deben su existencia a la obra de Cristo como agente de la Creación, siendo El
quien las mantiene intactas y quien las sostiene (Colosenses, 1:16-17);
[+] Cristo es la cabeza de la iglesia y el primero en
resucitar con un cuerpo espiritual e inmortal (Colosenses, 1:18);
[+] el misterio de “Cristo en vosotros” (Colosenses,
1:26-27, 4:6, 1 Corintios, 3:16, 6:19);
[+] en Cristo están escondidos todos los secretos de
la sabiduría y el conocimiento (Colosenses, 2:3);
[+] el “humanismo secular” infiltrado en la iglesia
como fuente de las herejías (Colosenses, 2:8);
[+] la “circuncisión de Cristo” (Colosenses, 2:11);
[+] el triunfo de Cristo en la cruz contra satanás y
sus demonios (Colosenses, 2:14-15);
[+] la iglesia eximida de cumplir con la liturgia
(prácticas que regulan el culto) del AT (Colosenses, 2:16);
[+] el culto a los ángeles y a los santos muertos
atenta contra la supremacía de Cristo como cabeza de la iglesia (Colosenses,
2:18-19);
[+] la avaricia es idolatría (Colosenses, 3:5);
[+] la relación entre esposos (Colosenses, 3:18-19);
[+] la relación entre padres e hijos (Colosenses, 3:20-21);
[+] la relación entre patrones y empleados
(Colosenses, 3:22-24, 4:1);
[+] todas las cartas de Pablo son para toda la iglesia, de todos los tiempos (Colosenses, 4:16);
Marcelo D. D’Amico
Maestro de la Palabra – Ministerio REY DE GLORIA
