martes, 8 de abril de 2014

LA DOCTRINA DE LA ELECCION DE DIOS


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Les presento aquí la desgrabación de un video de Paul Washer sobre este interesante tema. ¿Somos nosotros los que elegimos a Dios o El nos elige y nos atrae hacia El?. ¿Cómo es que un día nuestro velo es corrido y nuestra ceguera espiritual es quitada y podemos ver a Dios claramente?. ¿Dios elige arbitrariamente a quien correrá el velo y quitara la ceguera espiritual?. ¿Son las posibilidades de salvación iguales para todos los hombres o solo son salvos aquellos hombres señalados por Dios?. Todas estas preguntas serán contestadas en este video. La situación es la siguiente. Un estudiante del seminario de teología encara (se dirige) a Paul Washer en un bar y comienza a hacerle preguntas acerca de la “doctrina de la elección de Dios”. Paul Washer, gentilmente, lo escucha y comienza a responderle. Ante cada respuesta de Paul Washer, el estudiante propone nuevas preguntas y el tema se va poniendo más que interesante. A mí me resulto absolutamente revelador. Más abajo les dejo el video.

Desgrabación del video:

ETUDIANTE-Disculpe, le tengo una pregunta. Hay algo que no entiendo. Me he criado bautista del Sur toda mi vida y estoy buscando la verdad, realmente con fuerza, en mi vida en este momento. Estoy en el seminario y quiero entender la “doctrina de la elección”, y cosas así. Mi compañero de cuarto es calvinista y el ha estado tratando de enseñarme un poco. Pero solamente quiero saber la verdad y ellos me dijeron que usted es la persona, usted sabe. ¿Hay alguna forma en que usted pueda, ya sabe, cualquier cosa que usted pueda decirme para entender esto con más claridad?.

PAUL WASHER-Puedo decirte algo, pero antes permíteme. Si vas al sitio web de mi pastor “Anclado en la Verdad”, el tiene una serie de sermones llamados “Elección y Plan Simple”, algunos de los mejores que jamás hayas escuchado (http://www.anchoredintruth.org). Todo se reduce a lo siguiente. Tienes que responder una pregunta: ¿el hombre esta radicalmente depravado?, que es la única pregunta que debes hacerte, porque si el hombre está verdaderamente muerto en sus pecados, si el verdaderamente aborrece a Dios, si todos los hombres son igualmente malvados, entonces la pregunta es: ¿cómo estas parado aquí, ahora, creyendo en Dios, mientras que algunos de tus amigos, que incluso son mas morales que tu, todavía lo aborrecen?. ¿Qué paso?. Si me dices que abriste tu corazón, yo te diré “no, no lo hiciste”, porque la Biblia dice que Dios abrió el corazón de Lidia (Hechos, 16:14 Entonces una mujer llamada Lidia, vendedora de púrpura, de la ciudad de Tiatira, que adoraba a Dios, estaba oyendo; y el Señor abrió el corazón de ella para que estuviese atenta a lo que Pablo decía). Si tú me dices “bueno, yo me arrepentí”, yo te diré que el arrepentimiento es una gracia evangélica en todas las confesiones, lo cual quiere decir que viene de Dios, como un regalo. Si tú me dices “bueno, yo creí”, yo te diría que, de acuerdo a Efesios 2, la fe también es un regalo de Dios (Efesios, 2:8 Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; 2:9 no por obras, para que nadie se gloríe).

ESTUDIANTE-Yo se que la Biblia dice que el hombre no puede venir a Dios, a menos que sea arrastrado por Dios. Yo sé que es así, pero mi pregunta es: ¿es la oferta de la salvación para todos los hombres,  o Dios en la Eternidad se sentó y dijo: es para ti, para ti y tú, tú y tú se van al infierno?.

PAUL WASHER: Mira, primero que todo tu problema es este. Digamos que no existe “elección”. Nada. ¿Ok?. Vamos a empezar de nuevo y decir que no existe “elección”. Ahora, digamos que el hombre esta radicalmente depravado y que no puede venir a Dios, a menos que Dios lo arrastre hacia El. Así que Dios viene a los hombres y les dice: “cualquiera que doble sus rodillas delante de mí, cualquiera que acepte a mi Hijo como su salvador será salvo”. Ya que cada hombre esta radicalmente depravado, todos ellos aborrecen a Dios. Todos ellos blasfeman contra El, se dan la vuelta y caminan hacia el infierno. Todo el mundo se va al infierno ¿la culpa es de Dios?. Bien, digamos que esa es la realidad, digamos que la Biblia dice la verdad y que los hombres aborrecen a Dios en gran manera. Entonces ¿quién será salvo?. Absolutamente nadie. Y si Dios no salva a ninguno, porque todo el mundo es malo y lo rechaza ¿es Dios injusto en hacer eso?. No. Entonces esto es lo que tenemos sin la “elección de Dios”: tienes a todo el mundo odiando a Dios y yéndose al infierno. Y la otra opción es esta: entre todos los hombres malvados, para su propia gloria, y para mostrar su propia bondad, desde antes de la fundación del mundo, El escogió un grupo de hombres, para manifestar su gloria en ellos. ¿Es esto injusto?. ¿Dejo afuera a otros hombres?. Tienes dos opciones: Dios salva a un grupo de personas por su propia soberanía o todo el mundo se va al infierno (oíste bien: todo el mundo). Porque todos los hombres son malvados. Debes darte cuenta de esto: si Dios, ahora mismo, abre las puertas del infierno y dice “todo el que quiera salir del infierno lo único que tiene que hacer es doblar sus rodillas  y reconocer mi señorío”, todos ellos cerrarían del golpe la puerta y se quedarían en el infierno. Lo que sucede es que, a causa del “Cristianismo Humanista”, no nos damos cuenta de que los hombres son realmente malvados. Te hare una pregunta: ¿has visto tú la película “El Señor de los Anillos”?. Saruman, el Mago Blanco, hace esos horribles Orcos, que salen de la Tierra del Mal. Bien. Cuando Aragorn y sus amigos masacran a los Orcos, como si fueran insectos, cada vez que ellos matan un Orco tu gritas “si, bien hecho!!!!”. ¿Por qué?. Porque los Orcos son realmente malvados. Son perversos. Y ahí está tu problema: tú no piensas que los hombres realmente sean así. Pero los hombres son realmente perversos. Los hombres realmente merecen el infierno.

ESTUDIANTE-Si, yo creo eso.

PAUL WASHER-Bien. Hablemos ahora de la “doctrina de la inhabilidad”, según la cual los hombres no pueden, por si mismos, venir a Dios. Jesucristo dijo esto (Juan, 6:44 Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere).  Ahora bien. Tú puedes pensar: si los hombres no pueden venir a Dios ¿cómo puede El juzgarlos?. Sería como juzgar a un hombre ciego porque no puede leer. Si los hombres no pueden venir a Dios, entonces el hombre no es culpable, sino solo una víctima. Pero esto es lo que tienes que entender: los hombres no “pueden” venir a Dios porque ellos, en realidad, no “quieren” acercarse a Dios. Ellos no se acercan a Dios porque ellos lo aborrecen y, por lo tanto, ellos son responsables. El hombre es malo, Dios es bueno. Así que los hombres aborrecen a Dios. Ellos aborrecen su ley. Ellos aborrecen todo acerca de Él. La Biblia dice que los hermanos de José “no podían” hablar pacíficamente con el (Génesis, 37:4 Y viendo sus hermanos que su padre lo amaba más que a todos sus hermanos, le aborrecían, y no podían hablarle pacíficamente). Los hermanos de José hablaban su mismo idioma. ¿Por qué no podían hablar entonces  con él?. Porque lo odiaban. Y es por esto mismo que jamás ningún hombre vendrá a Dios. Si Dios viene y dice “muy bien, todos hagan su elección”, nadie vendría a Dios. ¿Por qué?. Porque lo aborrecen. Y es por eso que son juzgados por su moral, su inhabilidad. Debido a su incapacidad moral. Todos ellos aborrecen a Dios. Por lo tanto, tienes a toda la raza humana, cada uno de ellos esta caído. Cada uno de ellos es aborrecedor de Dios. Dios dice “quien quiere ser salvo”. Y todos blasfeman el nombre de Dios, entran al infierno y cierran la puerta de golpe. Eso es lo que tienes, porque los hombres son verdaderamente malvados. Y si, como creemos, fuera que Dios dijo: voy a redimir  un Pueblo y dárselo a mi Hijo, por mi propia elección soberana, El no está haciendo injusticia a nadie. Ahora bien ¿cómo puede salvarlos?. Porque he aquí una pregunta: ¿estas espiritualmente muerto antes de la conversión?. Si. Entonces ¿cómo vienes a Cristo?. Si estas espiritualmente ciego ¿cómo puedes verlo?.

ESTUDIANTE-El me atrae hacia El.

PAUL WASHER-Pero tú eres un hombre muerto. Tú eres un hombre muerto, algo tiene que hacer contigo. Si Dios te llama, tu no iras porque lo aborreces, vas a correr lejos de Él. Es por eso que todos, mira, escucha con mucha atención, en todas las confesiones cristianas, las antiguas confesiones cristianas, en La Reforma, las confesiones bautistas tempranas, la idea era que para creer en Jesús tu tenias que nacer de nuevo, pero a ti, en cambio, te han enseñado de esta manera: “si tú crees en Jesús, puedes nacer de nuevo”. Esa es la diferencia. Porque si le digo al hombre muerto “mira, hay un hospital cerca de aquí, allí te pondrán unos electrodos, vamos, levántate y sígueme al hospital”, no tiene sentido, porque el hombre está muerto. Así que cuando Jesús dijo “Lázaro, ven fuera”, tenemos un problema: Lázaro estaba muerto ¿cómo pudo, entonces, oír la orden?. La orden no era solo para darse. Al momento que se da la orden, Lázaro debe ser resucitado para ser capaz de oír la orden y responder. Es por eso que, probablemente, tú has escuchado el Evangelio por muchos años y estas sentado allí y no te importa, tal vez en su momento hiciste una profesión de fe y nada más y un día el Evangelio es predicado y ¡zas!!, el velo es corrido, la ceguera es quitada y no solo eso sino que ahora lo deseas. Algunas personas dicen: lo que Dios hace es llevarnos a un cierto punto y luego nos deja decidir. Pero tenemos un problema con eso, porque si Dios solamente ilumina la mente del pecador, entonces el pecador vera a Dios y mas lo aborrecerá. Entonces, Dios no solo ilumina la mente sino que, además, cambia el corazón. Con un corazón nuevo, por primera vez deseas a Jesús y dices: lo amo y estoy irresistiblemente atraído hacia El. Lo quiero más que todo.

Lo anterior es una desgrabación del siguiente video:

QUE DIOS LOS BENDIGA A TODOS!!!