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Continuamos con el estudio sistemático del Libro de Apocalipsis. No
obstante, para seguir el hilo del estudio completo, no olvides ver los estudios
anteriores, publicados en este mismo blog:
Libro de
Apocalipsis – Capitulo 1:
Libro de
Apocalipsis – Cap. 2 y 3 – 1ª Parte:
Continuamos con los cap. 2 y 3, 2ª parte:
Un Estudio Bíblico por Jack Kelley
Fuente:
Cuando el Imperio Romano creció en prominencia, Roma pronto llegó a ser el
centro mundial de las prácticas y tradiciones de la religión pagana de
Babilonia. Pérgamo desapareció de la escena, pero el matrimonio mixto del
cristianismo con el paganismo, iniciado allí ha producido cuatro “hijos”, los
católicos romanos (Tiatira), los protestantes principales (Sardis), los
Evangélicos (Filadelfia) y la iglesia apóstata (Laodicea). Todas estas iglesias
están muy vivas hoy día.
A la
Iglesia en Tiatira (Apocalipsis 2:18-29):
“Y escribe al ángel de la iglesia en Tiatira:”
Tiatira significa sacrificio continuo. En la Iglesia Católica, el
Señor aun permanece en la cruz, y ellos creen que la hostia de la comunión se
convierte en Su verdadero cuerpo y sangre cuando se consume. Es la primera
carta con el futuro a la vista, lo que me lleva a la concluir que las tres
iglesias anteriores han desaparecido. Es también la primera carta cuyos
miembros están divididos en dos categorías, los salvos y los no salvos.
(Título) “El Hijo de Dios, el
que tiene ojos como llama de fuego, y pies semejantes al bronce bruñido, dice
esto:”
No podría ser más claro. Aunque nacido de una virgen, Quien habla con fuego
en los ojos debe de ser tratado como el Hijo de Dios, no de María.
(Alabanza) “Yo conozco tus
obras, y amor, y fe, y servicio, y tu paciencia, y que tus obras postreras son
más que las primeras.”
La Iglesia Católica es bien conocida por sus esfuerzos en llevar
misericordia y compasión, así como también llevar el Evangelio a los hijos de
Dios.
(Crítica) “Pero tengo unas
pocas cosas contra ti: que toleras que esa mujer Jezabel, que se dice
profetisa, enseñe y seduzca a mis siervos a fornicar y a comer cosas
sacrificadas a los ídolos. Y le he dado tiempo para que se arrepienta, pero no
quiere arrepentirse de su fornicación”.
El título “Reina del Cielo” con el que muchos católicos se refieren a
María, fue primeramente utilizado en Semiramis, la esposa de Nimrod, el
fundador de Babilonia, y madre de Tamez. Semiramis se declaró como una diosa y
afirmó que Tamez nació sobrenaturalmente habiendo sido concebido por el dios
Sol, y así nació la primera religión falsa, el culto de la madre/hijo.
Según la leyenda, mientras Tamuz salió a cazar, lo mató una fiera salvaje.
Semiramis hizo duelo durante 40 días, al final de los cuales Tamuz fue
levantado de los muertos. Así fue como se formó el sacerdocio célibe para
conmemorar esto y se nombró un sacerdote principal que fue declarado infalible.
El duelo de 40 días (que ahora se le llama la Cuaresma), el tronco
navideño, el árbol siempre verde, el muérdago y los bollos calientes de pan en
forma de cruz, fueron símbolos utilizados en los rituales conmemorativos de ese
evento, y así fue como se inició el culto de la madre/hijo.
Más tarde, los romanos adaptaron estos rituales a la muerte y el
renacimiento del sol en el solsticio de invierno, pero en el Siglo IV las
tradiciones que rodeaban a Semiramis y Tamuz fueron atribuidas a María y Jesús
y llegaron casi sin ningún cambio al catolicismo romano, en donde permanecen
hoy día.
En esta carta, a Semiramis se le llama simbólicamente Jezabel, pues aleja a
las personas de la verdad hacia la idolatría. Pero también la verdadera Jezabel
está a la vista aquí. Ella era la hija del Rey de Fenicia, una princesa pagana
mejor conocida por el consejo que dio a su esposo el rey israelita Acab, de
cómo apropiarse de la viña que él quería. Ella levantó acusaciones falsas en
contra del dueño de la viña, contrató testigos que también dieran falso
testimonio, y así el dueño de la viña fue condenado y ejecutado. Luego ella
confiscó la viña en nombre del rey (1
Reyes 21:1-16). Siglos más tarde la Iglesia Católica obtendría
mucha de su riqueza de la misma manera. Fortunas sin medida fueron adquiridas
durante estas inquisiciones.
Jezabel fue también la patrocinadora de los 450 sacerdotes de Baal a
quienes Elías degolló en el Monte Carmel. El Señor ve la idolatría como una
infidelidad, y a Jezabel como la que ha fomentado la adoración a Baal,
dirigiendo a las personas al adulterio espiritual. Los muchos santos a quien
los católicos les rezan, y las obras sacramentales que deben de hacer para
obtener y mantener su salvación, no están en las Escrituras y todas ellas niegan
la suficiencia de la cruz. Por esta razón, a la Iglesia Católica a
menudo se le llama “la religión de algo más”. Jesús más María. La gracia más
las obras. Las Escrituras más la tradición. El darle el crédito por las obras
de Dios a alguien más, es el adulterio espiritual que permanece hoy día.
(Advertencia) “He aquí, yo la
arrojo en cama, y en gran tribulación a los que con ella adulteran, si no se
arrepienten de las obras de ella. Y a sus hijos heriré de muerte, y todas las
iglesias sabrán que yo soy el que escudriña la mente y el corazón; y les daré a
cada uno según sus obras.”
Todas aquellas personas que insisten ser juzgadas por sus obras, les será
otorgado su deseo. Tristemente el énfasis en sus obras religiosas ha
ensombrecido el verdadero mensaje del Evangelio al punto de que algunos
católicos de toda una vida nunca llegan a conocer al Señor en una forma
personal. El Señor los juzgará según los motivos de su corazón. ¿Fueron sus
buenas obras hechas con gratitud por el regalo gratuito de la salvación, o
fueron hechas en un esfuerzo inútil de ganarla por sus propios medios?.
(Llamado) “Pero a ustedes y a
los demás que están en Tiatira, a cuantos no tienen esa doctrina, y no han
conocido lo que ellos llaman las profundidades de Satanás, yo les digo: No les
impondré otra carga; pero lo que tienen, reténganlo hasta que yo venga.”
Los demás han mirado a través de las capas de las tradiciones y de las
obras y de los santos y de los rituales, y han encontrado el rostro del Señor
que los mira. Todas aquellas personas que se aferran tenazmente a Él, tendrán
su recompensa.
(Promesa) “Al que venciere y
guardare mis obras hasta el fin, yo le daré autoridad sobre las naciones, y las
regirá con vara de hierro, y serán quebradas como vaso de alfarero; como yo
también la he recibido de mi Padre; y le daré la estrella de la mañana.
Ellos se unirán a Él en Su trono como co-regentes del universo, la
Desposada de Cristo, Su amada iglesia.
Nosotros no estamos en la iglesia por el lugar que ocupamos en la banca, o
por el nombre en la puerta, o por las buenas obras que hacemos. Nosotros
estamos en la iglesia porque hemos creído por la fe que “Cristo murió por nuestros pecados, conforme
a las Escrituras; y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a
las Escrituras. (1 Corintios
15:3-4).
(Desafío) “El que tiene oído,
oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.”
Hay un poquito de Tiatira en todos nosotros. Aún después de que hemos sido
salvados por la gracia, todos nosotros tenemos una lista de lo que debemos
hacer y lo que no debemos hacer. Y entonces, derivamos nuestra auto-imagen como
creyentes, por estar adheridos a esa lista, generalmente juzgando a los demás
en cómo deben de cumplir con nuestros mandamientos. Cuando fracasamos,
recurrimos de nuevo a la gracia de Dios, pero no nos sentimos bien con nosotros
mismos hasta que nos volvemos a nuestra lista otra vez. Se nos olvida que la
gracia más las obras es igual a obras. Las dos son como el agua y el aceite, no
se pueden mezclar. “Más al que no
obra, sino cree en aquel que justifica al impío, su fe es contada por justicia” (Romanos 4:5).
La única experiencia negativa que tuvimos en toda nuestra visita a los
lugares de las siete iglesias en Turquía sucedió en Tiatira, llamada Akisar hoy
día. Después que un amable y amistoso guarda abrió el sitio donde la iglesia
estuvo una vez y nos entregó el material que explicaba lo que estábamos
buscando, nos alejamos para buscar dónde almorzar, pensando lo placentero que
nuestra estadía había sido hasta ese momento. Calle abajo descubrimos una
tienda al aire libre donde un vendedor vendía los bocadillos de pollo a la
barbacoa que son tan populares en Turquía, y que también habíamos venido a
saborear.
Esperando nuestros bocadillos, se nos acercó un hombre que parecía tener
alguna posición de autoridad. Sus maneras eran muy hostiles, y sus preguntas
transmitieron un aire de sospecha. Nos alejamos de allí rápidamente, pensando
si acaso era un agente de la policía, o del gobierno o un oficial de una
religión hostil al cristianismo. Al alejarnos en el automóvil, también nos
dimos cuenta de que los bocadillos no se podían comer. El pollo estaba
descompuesto, como si las entrañas no hubieran sido removidas antes de
cocinarlo. Al leer de nuevo la carta a Tiatira nos impresionaron los contrastes
entre el bien y el mal, tanto en la carta como en nuestra visita.
A la
Iglesia en Sardis (Apocalipsis 3:1-6):
“Escribe al ángel de la iglesia en Sardis:”
Sardis significa remanente. Como lo hizo en la Carta a Tiatira,
el Señor hace la distinción entre los perdidos y los salvos (el remanente) en
Sardis. La iglesia en Sardis representa la Reforma
Protestante. Cuando Lutero y otros abandonaron el catolicismo romano, fue
para buscar la verdad. Los católicos habían distorsionado la Palabra de
Dios en algo que nunca debió haber sido, agregándole a las Escrituras e
imponiendo severas cargas espirituales a sus seguidores.
El llamado de la Reforma fue, “Sola fides (Sólo por la fe), Sola
Gratia (Sólo por la gracia), Solus Cristus (Sólo con Cristo), y Sola Scriptura
(Sólo Su Palabra).”
(Título) “El que tiene los
siete espíritus de Dios, y las siete estrellas, dice esto:”
El Señor le recuerda a la Iglesia en Sardis Quién es el que les
escribe. Él es el Dador del Espíritu Santo, y del Guardián del ángel que los
pastorea.
(Crítica) “Yo conozco tus
obras, que tienes nombre de que vives, y estás muerto.”
Jesús le dijo a la mujer junto al pozo, “Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es
necesario que adoren” (Juan
4:24). En su búsqueda de la verdad, los protestantes descuidaron las
cosas del Espíritu y por varios cientos de años, casi nunca escucharon los
susurros del Ruach Elohim (el Espíritu de Dios) en su entorno. Cuando el Gran
Despertar a finales de los años de 1.800 y comienzos de los 1.900, produjo que
los Dones del Espíritu vieran de nuevo la luz, ellos rechazaron la idea, dando
como resultado que nacieran los movimientos Pentecostal, primero, y luego el
Carismático.
(Advertencia) “Sé vigilante,
y afirma las otras cosas que están para morir; porque no he hallado tus obras
perfectas delante de Dios.”
Cuándo la Escuela Superior Alemana del Alto Criticismo invadió
sus seminarios con sus teorías paganas sobre la “verdadera” autoría de la
Biblia, y los racionalistas modernos, a los cuales ellos dieron a luz,
explicaron que no había milagros, no hubo ningún discernimiento de las
Escrituras para poder resistirlos. Y así fue cuando habiendo rechazado
primeramente el Espíritu, también ellos ahora habían perdido la Verdad.
(Llamado) “Acuérdate, pues,
de lo que has recibido y oído; y guárdalo, y arrepiéntete. Pues si no velas,
vendré sobre ti como ladrón, y no sabrás a qué hora vendré sobre ti. Pero
tienes unas pocas personas en Sardis que no han manchado sus vestiduras; y
andarán conmigo en vestiduras blancas, porque son dignas.”
Como fue el caso con la iglesia católica, solamente permanece un remanente
del protestantismo denominacional que es salvo. El resto, habiendo trabajado
intensamente para hacer que Dios fuera lo suficientemente pequeño como para
caber en sus mentes, ahora lo encuentran demasiado pequeño para satisfacer sus
necesidades. Ellos estarán entre los más sorprendidos al encontrar que fueron
dejados atrás cuando los eventos del tiempo final se desarrollen. (Observe que
el Señor no promete venir por ellos, sino venir a ellos.).
(Promesa) “El que venciere
será vestido de vestiduras blancas; y no borraré su nombre del libro de la
vida, y confesaré su nombre delante de mi Padre, y delante de sus ángeles.”
Pero al remanente de creyentes, Él les dará las vestiduras blancas de la
justicia que es por la fe, y se complacerá al presentárselos a Su Padre como
miembros de la Eterna Familia de Dios.
(Desafío) “El que tiene oído,
oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.”
Existen dos extremos en el cristianismo hoy día. La ortodoxia muerta del
protestantismo principal, la cual no puede oír el Espíritu y cuyo diluido
evangelio no tiene ningún poder para salvar, se encuentra en un extremo del
espectro. El “celo sin conocimiento” de los carismáticos quienes con tanta
frecuencia ignoran las admoniciones de Su palabra y permiten los excesos más
espantosos del espiritualismo, está en el otro extremo. Se nos dice de adorar a
Dios en espíritu y en verdad, pero un enfoque muy grande hacia ambos puede
causar la pérdida de los dos.
El lugar más importante en Sardis es hoy día una gran sinagoga y un
gimnasio (escuela) abandonados. Meditando en el lugar pensé cómo la iglesia
protestante ha abandonado sus raíces judías al haber ignorado el Antiguo Testamento,
aun dudando de su veracidad. Habiendo aprendido, del Nuevo Testamento, lo que
el Señor hizo pero sin entender por qué lo hizo porque ellos nunca han leído el
Antiguo Testamento, han perdido el significado último que una vez validó su
teología. Se convirtió en forma sin sustancia.
Estas dos hijas definieron el cristianismo hasta los años de 1.800, cuando
el Señor de nuevo hizo grandes cosas y la Iglesia nació otra vez en
la tercera hija de Pérgamo. Más en el próximo estudio.
QUE
DIOS LOS BENDIGA A TODOS!!!!