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Te dejo el video donde predico acerca de este tema (el contenido del video es el mismo que el expuesto mas abajo):
Introducción
Introducción
En
la Biblia, la “reina del cielo” es mencionada únicamente en el Libro de
Jeremías:
Jeremías, 7:18 Los hijos recogen la leña, los padres encienden el fuego, y las mujeres amasan la masa, para hacer tortas a la reina del cielo y para hacer ofrendas a dioses ajenos, para provocarme a ira.
Jeremías, 7:18 Los hijos recogen la leña, los padres encienden el fuego, y las mujeres amasan la masa, para hacer tortas a la reina del cielo y para hacer ofrendas a dioses ajenos, para provocarme a ira.
Y
vuelve a ser mencionada en Jeremías, 44:17-19 y 25.
Cabe
aclarar que Dios levanto a Jeremías como profeta en una época de gran apostasía
de Israel. Y la reina del cielo era uno de los dioses paganos adorados en
Israel.
El
reino del norte, también llamado Israel o Efraín, con capital en Samaria, ya
había caído, a causa de la apostasía, en 722 a.C. a manos del imperio asirio. Jeremías
profetiza en el reino del sur, también llamado Judá, compuesto por las tribus
de Judá y Benjamín, con capital en Jerusalén, el que finalmente cae, también a
causa de la apostasía, en 586 a.C. a manos del imperio babilónico, comandado
por Nabucodonosor cumpliéndose, de esta manera, las profecías de Jeremías.
La
reina del cielo es un espíritu de error religioso y de idolatría. En Babilonia
es “Istar” (diosa de la fertilidad) y en Fenicia es “Astoret”. En su adoración
participaban sobre todo las mujeres.
La tradición y el magisterio
del catolicismo
Los
católicos suelen afirmar (en realidad, sus líderes) que la única fuente de
revelación, para ellos, es “la tradición y el magisterio”. Pero ¿qué significan
estas palabras?.
Empecemos
por la "tradición":
Según
los católicos, la "tradición apostólica" o "sagrada
tradición", es la parte de la Palabra revelada por Dios que no fue
registrada en la Biblia, pero que sigue viva en la iglesia. Según este enfoque,
los apóstoles transmitieron a los obispos (sus sucesores) todo lo que recibieron
de Cristo y aprendido del Espíritu Santo y los obispos, a su vez, lo
transmitieron a todas las generaciones de cristianos, hasta el fin de los
tiempos.
La tradición escrita
está en la Biblia y se denomina Sagrada Escritura, mientras que la que
permanece oral no tiene un nombre específico, sino que recibe el
nombre genérico de "tradición".
Así las
cosas, para los católicos la "revelación" tiene dos
partes: Escritura y tradición.
Por
ende, todo lo que los católicos afirmen y que no tenga sustento en las
Escrituras, provendría de revelaciones divinas no registradas en las
Escrituras, pero igualmente validas (al mismo nivel de la Biblia).
Nosotros,
desde ya, desconocemos esta "tradición oral" (Palabra de Dios
revelada no escrita en la Biblia) y que los católicos equiparan a la
Palabra de Dios escrita (la Biblia), sobre todo cuando las revelaciones
provenientes de esa "tradición oral" contradicen seriamente
(como ya veremos) las Escrituras.
Jesucristo
disputo con los fariseos de su época (de la misma forma que hoy disputaría con
los católicos) por colocar sus tradiciones y sus interpretaciones de la ley por
encima de la Palabra de Dios:
Mateo,
15:7 Hipócritas, bien profetizó de vosotros Isaías, cuando
dijo: 15:8 Este pueblo de labios me honra; Mas su
corazón está lejos de mí. 15:9 Pues en vano me honran, Enseñando
como doctrinas, mandamientos de hombres.
Marcos,
7:3 Porque los fariseos y todos los judíos, aferrándose a la tradición de
los ancianos, si muchas veces no se lavan las manos, no comen.
Marcos,
7:13 invalidando la palabra de Dios con vuestra tradición que habéis
transmitido. Y muchas cosas hacéis semejantes a estas.
Sigamos
por el "magisterio":
Según
los católicos, el "magisterio de la iglesia" es la función y
autoridad de enseñar que tienen el Papa (magisterio pontificio) y los obispos
que están en comunión con el (de donde se desprende que, los que no estamos
"en comunión" con el Papa, no tenemos autoridad para enseñar la
Palabra de Dios).
Desde
ya también rechazamos este concepto de "magisterio" según el cual la
iglesia romana es la única que tiene autoridad para enseñar la Palabra de Dios.
La reina del cielo y el
catolicismo romano
El
ídolo que el catolicismo romano ha hecho de la Virgen María es una alusión a
esta diosa pagana “Ishtar” o “Asroret”, detrás de la cual se mueve, como hemos
dicho, el espíritu inmundo de la reina del cielo.
La
teología católica le ha adjudicado a la Virgen María una serie de ministerios y
funciones totalmente ajenos a Biblia.
Pero
¿qué dice la Biblia sobre María, la madre de Jesús?.
Lucas,
1:27 a una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de
David; y el nombre de la virgen era María. 1:28 Y entrando el ángel en donde
ella estaba, dijo: ¡Salve, muy favorecida! El Señor es contigo; bendita tú
entre las mujeres.
Existe
una diferencia abismal entre la bienaventurada virgen hebrea mencionada en la
Biblia y la semidiosa que el catolicismo romano ha construido alrededor de su
imagen:
[+]
"Inmaculada sin pecado" (CIC [Catecismo Iglesia Católica] 490/4);
[+]
"Reina del Universo" (CIC [Catecismo Iglesia Católica] 966);
[+]
"Santísima Virgen, Madre de Dios" (CIC [Catecismo Iglesia Católica]
971);
[+]
"Trono de la Sabiduría" (CIC [Catecismo Iglesia Católica] 721);
[+]
"Abogada, Auxiliadora, Socorro, Mediadora" (CIC [Catecismo Iglesia
Católica] 969);
[+]
"Madre de la Iglesia" (CIC [Catecismo Iglesia Católica] 963, 975);
[+]
"Fuente de Santidad y Perfección de la Iglesia" (CIC [Catecismo
Iglesia Católica] 829);
Pero
hay más. Aunque todavía no es un dogma oficial de la iglesia católica romana,
muchos católicos (obispos y fieles) han solicitado, en varias oportunidades,
que la Virgen María sea declarada "corredentora" de la humanidad. El
concepto de corredención se refiere a una participación indirecta (pero
importante) de la Virgen María en la redención de la humanidad, porque María
dio a luz al Redentor (Jesucristo).
Demás
está decir que, en ningún lugar de las Escrituras se menciona jamás que María
sea, directa o indirectamente, salvadora o redentora del mundo, intercesora o
mediadora entre Dios y la humanidad.
[+]
Solo Jesús es el SALVADOR del mundo:
Lucas,
2:11 que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es CRISTO el
Señor.
Juan,
4:42 y decían a la mujer: Ya no creemos solamente por tu dicho, porque nosotros
mismos hemos oído, y sabemos que verdaderamente éste es el Salvador del mundo,
el Cristo.
Hechos,
13:23 De la descendencia de éste, y conforme a la promesa, Dios levantó a Jesús
por Salvador a Israel.
Efesios,
5:23 porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la
iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su Salvador.
Filipenses,
3:20 Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al
Salvador, al Señor Jesucristo;
Hechos,
4:11 Este Jesús es la piedra reprobada por vosotros los edificadores, la cual
ha venido a ser cabeza del ángulo. 4:12 Y en ningún otro hay salvación; porque
no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser
salvos.
[+]
Solo Jesús es INTERCESOR:
Romanos,
8:33 ¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que
justifica. 8:34 ¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más
aún, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que
también intercede por nosotros.
[+]
Solo Jesús es el MEDIADOR entre Dios y los hombres:
1
Timoteo, 2:5 Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres,
Jesucristo hombre,
Supongamos
que, para congraciarnos con los católicos, decidiéramos dar de crédito a la
"tradición oral" de la que hablan y aceptáramos que, todo lo que el
catolicismo romano afirma sobre María (y que no surge de la Biblia), es cierto.
Aun así, todavía tendríamos que resolver el siguiente punto: ¿qué hacemos
cuando esa "tradición oral" contradice lo que está escrito en la
Biblia?.
La
"tradición oral" católica afirma que María es “mediadora” entre Dios y
la humanidad (Catecismo 969):
"Esta
maternidad de María perdura sin cesar en la economía de la gracia, desde el
consentimiento que dio fielmente en la Anunciación, y que mantuvo sin vacilar
al pie de la cruz, hasta la realización plena y definitiva de todos los
escogidos. En efecto, con su asunción a los cielos, no abandonó su misión
salvadora, sino que continúa procurándonos con su múltiple intercesión
los dones de la salvación eterna [...] Por eso la Santísima Virgen es invocada
en la Iglesia con los títulos de Abogada, Auxiliadora, Socorro, Mediadora".
Pero
solo Jesucristo es (único) mediador entre Dios y los hombres (1 Timoteo, 2:5).
Si la Biblia dice que solo hay un mediador entre Dios y los hombres y
especifica quién es (Jesucristo), eso significa que no puede haber otro mediador
(María), porque, entonces, el especificado en la Biblia no sería el “único”.
Por
ende, la revelación de que María también es mediadora entre Dios y los hombres
(y la "tradición oral" que la inspira), es FALSA.
Características del espíritu
de la reina del cielo
El
espíritu inmundo de la reina del cielo:
[+]
es un espíritu de error religioso;
[+]
es una espíritu de idolatría;
[+]
es un espíritu territorial;
[+]
es un espíritu de falsa doctrina
[+] es un espíritu de error
religioso;
El
ídolo que el catolicismo romano ha construido alrededor de la imagen de la
virgen María, es un sincretismo (mezcla) entre:
[a]
paganismo, porque hay reminiscencias de dioses babilónicos (Ishtar) y fenicios
(Astoret);
[b]
cristianismo, porque es cierto que María
es la madre de Jesús; y
[c]
doctrina de hombres, porque, como vimos, el catolicismo romano atribuye a María
ministerios y funciones – salvación, intercesión y mediación - que no surgen de
las Escrituras sino de la “tradición y el magisterio”;
[+] es una espíritu de
idolatría;
El
espíritu inmundo de la reina del cielo promueve la idolatría porque impulsa a
aquellos a quienes controla, a adorar a
un personaje bíblico (María) que necesito de la salvación de Cristo tanto como
nosotros.
Maria no puede salvar a nadie, porque ella misma reconoció que necesitaba de un salvador:
Lucas, 1:46 Entonces María dijo: Engrandece mi alma al Señor; 1:47 Y mi espíritu se regocija en Dios mi Salvador.
Dios condena la idolatría:
Maria no puede salvar a nadie, porque ella misma reconoció que necesitaba de un salvador:
Lucas, 1:46 Entonces María dijo: Engrandece mi alma al Señor; 1:47 Y mi espíritu se regocija en Dios mi Salvador.
Dios condena la idolatría:
Éxodo,
20:4 No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el
cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. 20:5 No
te inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte,
celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y
cuarta generación de los que me aborrecen,
Isaías,
42:8 Yo Jehová; este es mi nombre; y a otro no daré mi gloria, ni mi alabanza a
esculturas.
Pablo,
por su parte, revela cual es la esencia de la idolatría: culto a lo creado y no
al Creador.
Romanos,
1:25 ya que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto
a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos.
Amén.
[+] es un espíritu territorial;
El
espíritu inmundo de la reina del cielo no es uno de los típicos demonios
desencadenados contra la iglesia de Jesucristo porque, en ella, no se le da
ningún tipo de honra a la virgen María, solo el respeto que se merece por haber
sido la madre de Jesús, que es hasta donde revelan las Escrituras.
Se
trata, más bien, de un espíritu territorial que impide al avance del Evangelio
Verdadero. El dominio territorial de este espíritu puede verse claramente en
países con fuertes raíces católicas, tanto en América Latina (Argentina, Chile,
Colombia, etc.) como en Europa (España, Italia, Portugal, etc.).
No
sucede lo mismo, por ejemplo, en EEUU, que es un país mayoritariamente
protestante, donde el catolicismo romano prácticamente no tiene fuerza.
[+] es un espíritu de falsa
doctrina
Como
hemos visto, el catolicismo romano atribuye a la virgen María ministerios y
funciones que no surgen de la Biblia sino de una “tradición oral” transmitida
dentro de la iglesia (católica) desde los apóstoles a todas las generaciones de
cristianos que, como hemos visto en algunos casos, entra en contradicción con
la Palabra Escrita.
Oración contra el espíritu de
la reina del cielo
Señor
Jesucristo, con la autoridad que hay en tu nombre y con el poder que hay en tu
sangre atamos, reprendemos, echamos fuera, desalojamos a los lugares secos y vacíos
al espíritu inmundo de la reina del cielo y a todos los demonios que vienen con
el: error religioso, idolatría, falsa doctrina, confusión y mentira.
Atamos
todos estos espíritus inmundos y demonios y desatamos al Espíritu Santo y un
espíritu de sabiduría divina en (mencionar el país, provincia, municipio,
ciudad o pueblo).
Rompemos,
quebrantamos, despedazamos, arruinamos, conquistamos, saqueamos, dejamos
inhabitada y convertimos en anatema la fortaleza del espíritu inmundo de la
reina del cielo y distribuimos sus bienes.
¿Qué
significa “convertir en anatema”?
Significa
consagrar para Dios el lugar donde existía la fortaleza destruida, para que
nada más, contrario a Dios, pueda ser construido en ese lugar.
Basado
en:
Josué,
6:26 En aquel tiempo hizo Josué un juramento, diciendo: Maldito delante de
Jehová el hombre que se levantare y reedificare esta ciudad de Jericó. Sobre su
primogénito eche los cimientos de ella, y sobre su hijo menor asiente sus
puertas.
MARCELO
D. D’AMICO
Maestro
de la Palabra – Ministerio Rey de Gloria