domingo, 20 de mayo de 2012

SUSTENTO BIBLICO Y SEÑALES DEL RAPTO DE LA IGLESIA


Puedes bajar este post como archivo de Word, pinchando Aqui

Por el autor del blog:

Me veo en la obligación de hablar nuevamente sobre el arrebatamiento o rapto de la iglesia de Cristo, porque:

a)   Es un evento totalmente distinto (y anterior) a la segunda venida de nuestro Señor Jesucristo;
b)  Creo que, en efecto,  ocurrirá en breve tiempo; y
c)  Los que no participemos de este evento glorioso, tendremos que ver con nuestro propios ojos y padecer con nuestros propios cuerpos y con todos nuestros sentidos todas las calamidades que están descriptas en el libro de Apocalipsis;


Recordemos lo que es el Rapto o Arrebatamiento de la iglesia:

El rapto o arrebatamiento de la iglesia es la traslación de millones de personas vivas de la tierra a los cielos, en los días venideros y está acompañado por otro evento paralelo: la resurrección previa de todas aquellas personas que, antes de morir, pidieron perdón a Dios por sus pecados, aceptando a Jesús como su Señor y Salvador, en suma, todas aquellas personas que lo  amaron y lo esperaron aunque la muerte se les anticipo. O sea, tanto los muertos en Cristo (serán resucitados) como los que se encuentren vivos (serán “transformados”) serán llevados al cielo, en un pestañear e inmediatamente comenzara la Gran Tribulación. Nadie sabe la hora ni el día del rapto o arrebatamiento de la iglesia, pero, los que somos “pre-tribulacionistas” (rapto antes de la tribulación de 7 años) en cuanto a la época en que ocurrirá dicho evento, creemos que inmediatamente que la iglesia es raptada comienzan los últimos 7 años de la historia del gobierno del hombre en la tierra.

¿Hablo alguna vez Nuestro Señor Jesucristo, mientras piso la Tierra, a sus discípulos, acerca de este evento directamente?.

Veamos:

Según el Evangelio de Juan, Nuestro Señor Jesucristo dijo esto:

Juan, 14:1 No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. 14:2 En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. 14:3 Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis.

En el Evangelio de Lucas, a su vez, nos encontramos con esto:

Lucas, 21:36 Velad, pues, en todo tiempo orando que seáis tenidos por dignos de escapar de todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del Hombre.

Por su parte, en sus cartas o epístolas, Pablo de Tarso dice lo siguiente:

1 Corintios, 15:51 He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos; pero todos seremos transformados, 15:52 en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados.

Pablo dice aquí que estaba revelando un “misterio”. Esto quiere decir que Jesucristo no hablo abiertamente del rapto a sus discípulos. El Evangelio de Juan habla de que nuestro Señor Jesucristo vendría otra vez y nos tomaría para sí mismo, en tanto que el Evangelio de Lucas habla de orar, en todo tiempo, para que seamos dignos de escapar de todas las calamidades que vendrán. Dice “escapar”, no “soportar o padecer”. Se habla de escapar pero no se nos dice “como”. Recién el misterio fue revelado a través de Pablo.

Gálatas, 1:11 Mas os hago saber, hermanos, que el evangelio anunciado por mí, no es según hombre; 1:12 pues yo ni lo recibí ni lo aprendí de hombre alguno, sino por revelación de Jesucristo.

En otra de sus cartas, Pablo amplia este “misterio”:

1 Tesalonicenses, 4:15 Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron. 4:16 Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. 4:17 Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.
En “esta venida”, nuestro Señor Jesucristo se reúne con nosotros “en el aire”, es decir, no toca tierra. Esta no es su “segunda venida”. Este evento es anterior a su “segunda venida”. Su “segunda venida” esta descripta en el libro de Apocalipsis:

Apocalipsis, 19:11 Entonces vi el cielo abierto; y he aquí un caballo blanco, y el que lo montaba se llamaba Fiel y Verdadero, y con justicia juzga y pelea. 19:13 Estaba vestido de una ropa teñida en sangre; y su nombre es: EL VERBO DE DIOS.

Apocalipsis, 19:14 Y los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo, blanco y limpio, le seguían en caballos blancos. 19:15 De su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones, y él las regirá con vara de hierro; y él pisa el lagar del vino del furor y de la ira del Dios Todopoderoso. 19:16 Y en su vestidura y en su muslo tiene escrito este nombre: REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES. 19:17 Y vi a un ángel que estaba en pie en el sol, y clamó a gran voz, diciendo a todas las aves que vuelan en medio del cielo: Venid, y congregaos a la gran cena de Dios, 19:18 para que comáis carnes de reyes y de capitanes, y carnes de fuertes, carnes de caballos y de sus jinetes, y carnes de todos, libres y esclavos, pequeños y grandes. 19:19 Y vi a la bestia, a los reyes de la tierra y a sus ejércitos, reunidos para guerrear contra el que montaba el caballo, y contra su ejército. 19:20 Y la bestia fue apresada, y con ella el falso profeta que había hecho delante de ella las señales con las cuales había engañado a los que recibieron la marca de la bestia, y habían adorado su imagen. Estos dos fueron lanzados vivos dentro de un lago de fuego que arde con azufre. 19:21 Y los demás fueron muertos con la espada que salía de la boca del que montaba el caballo, y todas las aves se saciaron de las carnes de ellos.

Está claro que nuestro Señor Jesucristo no viene aquí a reunirse con nadie en el aire (lo que dice Pablo), sino que viene directamente a pelear contra el anticristo (y el falso profeta) y vencerlos.

Continúa Pablo hablando sobre el evento del rapto o arrebatamiento:

1 Tesalonicenses, 5:1 Pero acerca de los tiempos y de las ocasiones, no tenéis necesidad, hermanos, de que yo os escriba. 5:2 Porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá así como ladrón en la noche;

Pablo dice que el día del Señor vendrá “como ladrón en la noche”.

Pero Apocalipsis dice que todo ojo le vera.

Apocalipsis, 1:7 He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron; y todos los linajes de la tierra harán lamentación por él. Sí, amén.

Apocalipsis 1:7 habla de la “segunda venida”. Pablo habla del rapto. En el rapto de la iglesia, nadie conoce el día y la hora (solo Dios: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo). Los “tiempos y las ocasiones” que no se conocen son los relativos al rapto de la iglesia (aquí, el Señor vendrá como “ladrón en la noche”).

Retomemos lo que dice Pablo en 1 Tesalonicenses:

1 Tesalonicenses, 5:1 Pero acerca de los tiempos y de las ocasiones, no tenéis necesidad, hermanos, de que yo os escriba. 5:2 Porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá así como ladrón en la noche;

No obstante, a pesar de no conocer los “tiempos y las ocasiones” en que ocurrirá el rapto de la iglesia, a Pablo le fue revelada una señal profética (Amos, 3:7 Porque no hará nada Jehová el Señor, sin que revele su secreto a sus siervos los profetas):

Pablo nos advierte:

1 Tesalonicenses, 5:3 que cuando digan: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina, como los dolores a la mujer encinta, y no escaparán.

Pablo dice: cuando digan “paz y seguridad”. No dice cuando la consigan. ¿Quiénes?. Los reyes de la tierra.


En el siguiente video, veras (y escucharas) a Benjamín Netanyahu (primer ministro israelí), a Barak Obama, a Tony Balir, a Hilary Clinton, a Ban Ki-moon (Secretario General de la ONU), en suma los ‘líderes del mundo’, decir, una y otra vez, “paz y seguridad” (peace and security):




O sea: el rapto o arrebatamiento esta cerca.

Ahora, otra revelación impresionante acerca del porque la iglesia no estará en la tierra cuando Dios derrame su ira sobre sus moradores.

1 Tesalonicenses, 5:9 Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo,


Cuando Pablo hablo del rapto en 1 Tesalonicenses, 4:15 dijo: “Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor”. Pero como vimos Jesucristo, mientras estuvo en la tierra, no hablo abiertamente del rapto. A que palabras del Señor podría estarse refiriendo Pablo. ¿Podremos encontrar indicios del rapto de la iglesia en el AT por ejemplo?.

La respuesta es SI:

Isaías, 26:19 Tus muertos vivirán; sus cadáveres resucitarán. ¡Despertad y cantad, moradores del polvo! porque tu rocío es cual rocío de hortalizas, y la tierra dará sus muertos.

Pablo dijo que los muertos en Cristo resucitaran primero (no precederemos a los que durmieron).

Isaías, 26:20 Anda, pueblo mío, entra en tus aposentos, cierra tras ti tus puertas; escóndete un poquito, por un momento, en tanto que pasa la indignación.

¿Escondernos donde, mientras pasa la indignación de Dios?.

¿Serán las moradas de las que hablo nuestro Señor en el Evangelio de Juan?:

Juan, 14:2 En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. 14:3 Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis.

Isaías, 26:21 Porque he aquí que Jehová sale de su lugar para castigar al morador de la tierra por su maldad contra él; y la tierra descubrirá la sangre derramada sobre ella, y no encubrirá ya más a sus muertos.

Nótese, además, la diferenciación que se hace entre “pueblo mío” (escóndete un poquito mientras pasa la indignación) y el “morador de la tierra” (Jehová sale de su lugar para castigarlo por su maldad contra él).



QUE DIOS LOS BENDIGA A TODOS!!!