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La contrapartida del avivamiento espiritual que Dios prometió para
esta época (época en que derramaría su espíritu sobre toda carne), es la oposición
espiritual de Satanás, también reavivada. Oremos a nuestro Dios para que
recibamos el 100% de ese avivamiento espiritual.
1.- PLANTEO
El Diccionario de la Lengua Española (22ª edición) define al término
oposición, en diversas acepciones entre las cuales figuran:
-Disposición de algunas cosas, de modo
que estén unas enfrente de otras.
-Contrariedad o antagonismo entre dos
cosas.
-Contradicción o resistencia a lo que
alguien hace o dice.
Muchas veces recibimos algunos
comentarios tales como:
a) “No pude llegar a la Iglesia: el medio de transporte
inexplicablemente dejó de circular....”
b) “Cada vez que inicio mi oración a Dios, sucede algo impactante y debo dejar...”
c) “Intento leer La Biblia, pero me toma un sueño profundo..... y me duermo....”
d) “Desde que comencé a servir a Dios, se puso en contra mi propia familia....”
e) “Deseo ser obediente a Dios y bautizarme en agua, pero cuando llega el día previsto, me enfermo.....”
b) “Cada vez que inicio mi oración a Dios, sucede algo impactante y debo dejar...”
c) “Intento leer La Biblia, pero me toma un sueño profundo..... y me duermo....”
d) “Desde que comencé a servir a Dios, se puso en contra mi propia familia....”
e) “Deseo ser obediente a Dios y bautizarme en agua, pero cuando llega el día previsto, me enfermo.....”
f) “ A un amigo de la juventud, que se
encuentra en graves problemas, le hablé de Jesús, para que lo reciba en su
corazón...... y no me saluda más. Hasta noto que no quiere cruzarse
conmigo....”
Existen un sinnúmero de situaciones
similares a las descriptas, que nos suceden a diario. Inevitablemente
intentamos buscar el origen de la contrariedad: comúnmente por circunstancias
fortuitas, cuestiones humanas, falta de suficiente preparación nuestra, etc.
Algunos llegan a conclusiones
equivocadas, para cada uno de los puntos detallados, como se
indica, a modo de ejemplo, a continuación:
a) Debo cambiar de Iglesia.
b) La oración la comenzaré los días
que me sienta bien y no me suceda ningún contratiempo.
c) Podré leer La Biblia los días en que haya descansado lo suficiente.
Antes de leer La Biblia, probaré de consumir dos tazas de una infusión bien estimulante.
d) Dejo de servir a Dios. El no desea que le sirva. En la congregación hay hermanos más preparados que yo. Me dedicaré completamente a mi familia.
e) Dios no debe querer que me bautice. Esperaré lo suficiente hasta que el Pastor me lo exija.
c) Podré leer La Biblia los días en que haya descansado lo suficiente.
Antes de leer La Biblia, probaré de consumir dos tazas de una infusión bien estimulante.
d) Dejo de servir a Dios. El no desea que le sirva. En la congregación hay hermanos más preparados que yo. Me dedicaré completamente a mi familia.
e) Dios no debe querer que me bautice. Esperaré lo suficiente hasta que el Pastor me lo exija.
f) No deseo perder mi amistad. Le
hablaré de cosas mundanas para reconquistarlo.
Indudablemente que estas decisiones
equivocadas, producirán consecuencias negativas en nuestra vida espiritual.
Pero entonces.... ¿Es posible que
sucedan estas cosas “extrañas”?. Me siento cada día más consagrado al
Señor y noto que “algo” impide mi avance......
La oposición, ¿es natural, casual, humana o espiritual?
En vez de acudir al razonamiento humano, ¿por qué no escudriñar la Palabra de Dios?.
2.- SUSTENTO BIBLICO DEL TEMA
Leamos con detenimiento algunos
pasajes de La Biblia que nos dan luz frente a muchas
situaciones habituales que se nos presentan transitando el Camino de Dios.
1º Tesalonicenses: 2:17 Pero nosotros, hermanos,
separados de vosotros por un poco de tiempo, de vista pero no de corazón, tanto
más procuramos con mucho deseo ver vuestro rostro; 2:18 por lo cual quisimos ir a
vosotros, yo Pablo ciertamente una y otra vez; pero Satanás nos estorbó.
2º Tesalonicenses: 2:3 Nadie os engañe en ninguna manera;
porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de
pecado, el hijo de perdición, 2:4
el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de
culto; tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por
Dios.
3ª Juan: 1:9 Yo he escrito a la iglesia; pero
Diótrefes, al cual le gusta tener el primer lugar entre ellos, no nos recibe. 1:10 Por esta causa, si yo fuere,
recordaré las obras que hace parloteando con palabras malignas contra nosotros;
y no contento con estas cosas, no recibe a los hermanos, y a los que quieren
recibirlos se lo prohíbe, y los expulsa de la iglesia.
Filipenses: 1:27 Solamente que os comportéis como
es digno del evangelio de Cristo, para que o sea que vaya a veros, o que esté
ausente, oiga de vosotros que estáis firmes en un mismo espíritu, combatiendo
unánimes por la fe del evangelio, 1:28
y en nada intimidados por los que se oponen, que para ellos ciertamente es
indicio de perdición, mas para vosotros de salvación; y esto de Dios.
Hechos: 13:7 que estaba con el procónsul
Sergio Paulo, varón prudente. Este, llamando a Bernabé y a Saulo, deseaba oír
la palabra de Dios.
13:8 Pero les resistía Elimas, el mago (pues así se traduce su nombre), procurando apartar de la fe al procónsul.
13:8 Pero les resistía Elimas, el mago (pues así se traduce su nombre), procurando apartar de la fe al procónsul.
Hechos:18:5 Y cuando Silas y Timoteo vinieron
de Macedonia, Pablo estaba entregado por entero a la predicación de la palabra,
testificando a los judíos que Jesús era el Cristo. 18:6 Pero oponiéndose y blasfemando
éstos, les dijo, sacudiéndose los vestidos: Vuestra sangre sea sobre vuestra
propia cabeza; yo, limpio; desde ahora me iré a los gentiles.
2ª Timoteo: 3:7 Estas siempre están aprendiendo, y
nunca pueden llegar al conocimiento de la verdad. 3:8 Y de la manera que Janes y Jambres
resistieron a Moisés, así también éstos resisten a la verdad; hombres corruptos
de entendimiento, réprobos en cuanto a la fe. 3:9
Mas no irán más adelante; porque su insensatez será manifiesta a todos, como
también lo fue la de aquéllos.
2ª Timoteo: 4:14 Alejandro el calderero me ha
causado muchos males; el Señor le pague conforme a sus hechos. 4:15 Guárdate tú también de él, pues
en gran manera se ha opuesto a nuestras palabras.
3.- COMENTARIOS
Los pasajes bíblicos que preceden, nos
permite reflexionar sobre el tema de la oposición que nos ocupa.
a) Podemos afirmar que la oposición no
es natural ni humana, sino espiritual. El
Apóstol Pablo, hombre elegido por Dios para cumplir un ministerio evangelistero
sin precedentes en ese tiempo, varón consagrado y preparado, quien llevó el
Evangelio a Europa en peligrosos viajes misioneros, cuando en varias
oportunidades intentó viajar a Tesalónica, no pudo llegar. ¿Qué sucedió? La
respuesta está en La Biblia:
Satanás lo estorbó (oposición espiritual).
b) El “hombre de pecado” o “hijo de perdición” como menciona La Biblia, tiene una función principal: oponerse y levantarse contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto.
b) El “hombre de pecado” o “hijo de perdición” como menciona La Biblia, tiene una función principal: oponerse y levantarse contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto.
c) Personas pueden oponerse a la
predicación o enseñanza del Evangelio y al avance de la Obra de Dios, dentro y fuera de las
congregaciones.
d) Dicha oposición no debe intimidar ni desanimar a los hombres y mujeres de Dios, que fuimos llamados para cumplir con la Gran Comisión.
d) Dicha oposición no debe intimidar ni desanimar a los hombres y mujeres de Dios, que fuimos llamados para cumplir con la Gran Comisión.
e) No debemos poner nuestra atención
en “la persona” que se opone (ej. Diótrefes, Alejandro el calderero, Elimas el
mago, etc.) , pues no se trata de una problemática humana, sino espiritual.
4.- CONCLUSIONES
El mundo espiritual es tan real como
el mundo natural. Dos reinos se oponen: las tinieblas y la luz. Cuando
aceptamos a Jesús como Señor y Salvador de nuestra vida, El nos traslada de
reino: de las tinieblas a su luz admirable.
Nuestra lucha no es contra carne y sangre. Consecuentemente La Biblia nos revela que no es contra un amigo, un compañero de trabajo, un vecino, nuestra familia, sino con fuerzas espirituales de las tinieblas que se oponen sistemáticamente y sin descanso, al reino de la luz (“... todo lo que se llama Dios o es objeto de culto”) y por ende, a los creyentes en Cristo Jesús.
Concurrir a la Iglesia, orar, bautizarse, servir a Dios, testificar, son actividades básicas del Hijo de Dios, en las cuales los espíritus de las tinieblas presentan férrea resistencia, intentando desalentarnos con fuerte oposición para no cumplirlas.
Esta acción maligna de oposición también puede manifestarse en nuestras actividades seculares (trabajo, estudio), nuestra familia, finanzas, economía, etc. Cuando no se detecta a tiempo, o el diagnóstico de la situación es erróneo, los espíritus inmundos avanzan y continúan hasta “trabar” todas las actividades que debamos desarrollar.
Si equivocadamente abandonamos el
intento y no nos esforzamos perseverando en la acción y en la oración, Satanás
y sus huestes de maldad habrá ganado esa batalla.
A modo de ejemplos: cambiar de iglesia
sin la guía de Dios, orar muy poco tiempo, no leer ni proclamar Su Palabra,
dejar de congregarse, enojarse con los familiares y compañeros, evitar toda
relación interpersonal, etc., aunque pudieran justificarse humanamente, son
serios errores espirituales. Muchos
dan pasos al costado, otros se detienen para mirar atrás. Las consecuencias
son: debilitamiento en la fe, desánimo, tibieza, fracaso espiritual y apostasía.
Jesús ha venido a deshacer las obras
del diablo. No debemos usar nuestro razonamiento para intentar justificar algo,
ni utilizar armas humanas frente a esta problemática de la oposición
espiritual. Tenemos las armas espirituales poderosas en Dios para la
destrucción de fortalezas. Resistamos en el nombre de Jesús, y la oposición
huirá. La victoria está asegurada por la
Palabra de Dios. Jesús nos dio
autoridad espiritual sobre las fuerzas del mal y ahora es el momento en que
debemos ejercerla. Las distintas disciplinas del campo del conocimiento humano
no pueden resolver esta manifestación sistemática de contrariedad y
enfrentamiento.
Los hombres de Dios actuaron
dejándonos adecuados ejemplos en La
Biblia para imitar. Nosotros no
somos quienes para cambiar la estrategia que nos ha entregado el Señor en Su
Palabra: “Y pelearán contra ti, pero no te
vencerán; porque yo estoy contigo, dice Jehová, para librarte” (Jeremías 1:19).
Oro a Dios para que esta reflexión
ilumine tu entendimiento espiritual, y acudamos a la sabiduría y armas
poderosas que Dios nos otorga para enfrentar y vencer toda oposición
espiritual.
QUE DIOS LOS BENDIGA A TODOS!!!